Por: GILBERTO GONZÁLEZ HERNÁNDEZ.

La vida muchas veces nos estresa y nos deprime, queriéndonos dejar ahogados en las profundidades de la ansiedad y el miedo. Pero estoy aquí para recordarles que incluso en los momentos más oscuros, hay un destello de esperanza esperando ser encontrado.

La Promesa de Dios nos asegura que, «El Señor está cerca de los quebrantados de corazón y salva a los que están abatidos de espíritu”. Salmo 34:18.

Cree que tus luchas no te definen; son meramente capítulos en tu historia de resistencia y fuerza. Aférrate a la verdad de que días más brillantes nos esperan, “todo al final, será para tu bien y será un gran testimonio para la gloria de Dios”.

Con Dios, el futuro es siempre mayor y más brillante que el pasado. Recuerda, agradecer a aquellos que te aman y te apoyan en oración y en presencia, como una evidencia que Dios está contigo y te da la gracia y la fuerza para resistir, hasta alcanzar la victoria y ver lucirse a la misericordia y la bondad de Dios.

“Cada pequeño paso que das, por muy pequeño que sea, es un triunfo que vale la pena celebrar”.

Eres digno de amor, de alegría y paz, y posees el coraje para superar cualquier obstáculo que se interponga en tu camino. Recuerda que todo lo puedes EN CRISTO que te fortalece. No luches en tus fuerzas por que te desgastarás más, solo ríndete confía y cree, que Dios está contigo como un poderoso gigante y es su batalla, no es tuya.

¡No te rindas! Sigue adelante, porque tu historia es de perseverancia y transformación, guiada por la fe y alimentada por la esperanza.

Y como escribió el apóstol Pablo inspirado por el Espíritu Santo; Que “Hoy” La Paz que tiene Dios, esté contigo y sea como un árbitro, que gobierna sus mentes y se estaciona en su corazones… ¡Hasta ver la gloria de Dios!.

Dios les bendiga y bendiciones a todos.