Por: José Luis Camacho Acevedo.

Al designar a cinco nuevos personajes que integrarán su gabinete a partir del primero de octubre, manda la señal de que quiere un gabinete que funcione.

Las curricular de todos los hasta ahora nombrados, incluyendo a Rogelio Ramírez de la O, es incuestionablemente mejor que la mayoría de los que son integrantes del actual gabinete de AMLO.

Y a pesar de que la presidenta electa ya anunció que las secretarías de las fuerzas armadas, así como la de seguridad ciudadana, serán de las últimas en designar, en la Secretaría de Marina se están dando fuertes jaloneos por lograr imponer a un titular con perfiles de innegables lazos de parentesco.

Nos cuentan que en la Secretaría de Marina hay un intenso cabildeo para que el nuevo titular de la dependencia, que acompañará a Claudia Sheinbaum al inicio de su gobierno, sea un rostro familiar; esto porque los sobrinos políticos del actual Almirante secretario, Rafael Ojeda Durán, impulsan como candidato al jefe del Estado Mayor de la Armada, Almirante Alfredo Hernández Suárez. Dicen incluso que, para tratar de asegurar la posición y dejar al margen a otros perfiles, se lo presentaron ya recientemente a la presidenta electa, durante una visita que ésta hizo en compañía de Andrés Manuel López Obrador a la región del Istmo de Tehuantepec. Los principales impulsores de Hernández Suárez son los Contralmirantes Roberto y Fernando Farías Laguna, hijos de la cuñada de Ojeda Durán, quienes han ganado fama dentro de la Marina como los personajes que controlan el presupuesto de la dependencia, casi siempre para beneficiar a empresas de Guaymas, Sonora, el municipio del que son originarios. En caso de no cuajar el proyecto del Almirante Hernández, el plan B es impulsar como secretario de Estado al actual Oficial Mayor, Almirante César Carlos Presciado Velázquez, el mismo que precisamente permitió que los sobrinos alcanzaran tal nivel de poder en la asignación de contratos.

Esos nombramientos serán de los últimos.

Y ya Claudia Sheinbaum demostró que no será una presidenta electa que se deje presionar por nadie.